ROMA, 23 May. 17 / 04:03 pm (ACI).- Una iglesia dedicada a Nuestra Señora de Fátima e inaugurada recientemente con motivo de los 100 años de las apariciones marianas, fue atacada por una turba de un centenar de personas en la diócesis de Hyderabad, en el estado indio de Andhra Pradesh.
Según informó este 22 de mayo la revista Mondo e Missione del Pontificio Instituto Misiones Extranjeras (PIME), la iglesia había sido inaugurada por el Arzobispo de Hyderabad, Mons. Thumma Bala, el pasado 13 de mayo durante la fiesta del centenario de las apariciones de la Virgen de Fátima.
Foto: P. Vijay Kumar Rayarala,
Superior Regional del PIME en la India
La revista señaló que los responsables pertenecen a “los movimiento más fanáticos de la derecha nacionalista hindú” y que la iglesia quedó devastada “completamente”. Los vándalos destruyeron las estatuas de Jesús y de la Virgen, ornamentos, cuadros y sillas.
La información e imágenes fueron enviadas a Mondo e Missione por el P. Vijay Kumar Rayarala, superior regional del PIME en la India. La revista señaló que este ataque es “una señal particularmente preocupante no solo por el modo como fue ejecutado, sino también porque Hyderabad no se encuentra en una de las áreas donde este tipo de violencia haya sido verificada”.
“Estamos bajo shock y llenos de dolor. Que el Señor nos proteja y perdone a quienes han cometido esta destrucción. Es una señal muy peligrosa y nosotros los cristianos debemos estar unidos en la demanda de que sean detenidos los culpables”, expresó el P. Vijay.
Foto: P. Vijay Kumar Rayarala,
Superior Regional del PIME en la India
En declaraciones recogidas por Radio Vaticana, Mons. Bala señaló que “este acto de desacralización, de vandalismo y la destrucción de las estatuas hiere de modo profundo los sentimientos religiosos de la Iglesia Católica”.
Por su parte, el Arzobispo de Bombay, Cardenal Oswald Gracias, condenó este ataque y dijo que ha sido “una experiencia horrible”. Indicó que se mantiene en contacto con Mons. Bala.
Informó que en el momento del ataque no se estaba realizando ningún acto religioso, pero los atacantes comenzaron a molestar a los fieles presentes.
El Cardenal Gracias señaló que “la intolerancia hace mal al país y es una vergüenza para todos. Condeno fuertemente este incidente, esperamos que quede como un hecho aislado”.
“Estas cosas no hacen bien a la nación. Se trata de un pequeño grupo, sin embargo estos hechos representan una vergüenza para todos nosotros. Cada cierto tiempo se verifican estos incidentes”, indicó. Sin embargo, destacó que “esta vez el gobierno reaccionó de forma rápida: cerca de 15 personas han sido encarceladas, el gobierno ha prometido apoyo para las actividades de la Iglesia”.